El gobierno panameño aseguró que tomará medidas “contundentes” para frenar la migración por Tapón del Darién, alegando falta de “cooperación internacional” para abordar el fenómeno migratorio en su frontera con Colombia.
Panamá considera “insuficientes” los trabajos de los países de Sudamérica para detener el tránsito irregular por este corredor selvático, donde según cifras oficiales panameñas en lo que va del 2023 han cruzado por las fronteras entre Colombia más de 307.000 migrantes, número que supera las 248.000 personas registradas el 2022 por esa ruta.
¿Es legal el cierre de fronteras contra los inmigrantes?
Esto dice la organización de migración y derechos humanos (OHCHR)
"Las fronteras internacionales no son zonas de exclusión o excepción para las obligaciones de derechos humanos. Los Estados tienen la prerrogativa de gobernar la migración dentro de su jurisdicción, pero deben hacerlo de conformidad con sus obligaciones en materia de derechos humanos."
La travesía a través de la selva del Darién ha desafiado a innumerables inmigrantes en su búsqueda de una vida mejor. Esta vasta y densa selva tropical, ubicada entre Colombia y Panamá, se ha convertido en un paso peligroso y a menudo letal para aquellos que buscan llegar a América del Norte. Motivados por diversas circunstancias, desde la búsqueda de oportunidades económicas hasta la huida de la violencia y la persecución de latino América , estos valientes inmigrantes de diversos países incluso compatriotas ecuatorianos atraviesan los riesgos y ahora los países buscan frenar el transito de inmigrantes pero no piensan en lo que causan a las familias que arriesgan todo en busca de un sueño y salir adelante.
La selva del Darién, una de las regiones más biodiversas del mundo, alberga una amplia gama de obstáculos que dificultan enormemente este viaje. Enjambres de mosquitos, plantas espinosas, serpientes venenosas y terrenos difíciles son solo algunos de los desafíos que los inmigrantes deben superar para avanzar.
A pesar de los peligros y desafíos que enfrentan, los inmigrantes que atraviesan la selva del Darién demuestran una extraordinaria valentía y determinación. Su fortaleza y resiliencia son impulsadas por la esperanza de una vida mejor y la posibilidad de reunirse con sus seres queridos.
Es importante destacar que, aunque algunos inmigrantes logran llegar a su destino final, muchos otros se quedan en el camino. La selva cobra un alto precio en forma de vidas perdidas y sueños rotos. Esta tragedia humanitaria nos recuerda la necesidad de abordar las causas profundas de la migración y trabajar juntos para encontrar soluciones que protejan los derechos y la dignidad de todas las personas.
Como sociedad, para la mayoría de países es fundamental acoger a los inmigrantes con compasión y empatía, reconociendo el valor y las contribuciones que pueden aportar a nuestras comunidades. A través de políticas migratorias humanitarias y programas de asistencia, podemos brindarles el apoyo necesario para que puedan comenzar una nueva vida de manera segura y exitosa.